Esta secuencia didáctica nos ha permitido trabajar la ortografía de manera diferente, diseñando un juego de mesa con preguntas ortográficas, lo cual nos ha llevado también a trabajar una modalidad textual muy concreta: el texto instructivo. Pero el proyecto nos ha aportado también algo que va más allá de los contenidos curriculares: la capacidad de trabajar en equipo, la responsabilidad grupal, la toma de decisiones, la escucha activa y el desarrollo de nuestra parte creativa, entre otros aspectos.
Por otro lado, este proyecto se ha desarrollado en varias FASES:
- Fase inicial: presentación del proyecto y motivación.
- Fase intermedia: desarrollo de la secuencia didáctica, lo que ha implicado la elaboración de una baraja ortográfica, el prototipado en equipo de un juego de mesa y la redacción de un manual de instrucciones.
- Fase final: presentación del juego de mesa.
En cuanto a la fase de difusión, esta consistirá en llevar los juegos a 1º de la ESO para que el alumnado de esta etapa educativa pueda practicar con ellos la ortografía.
Como conclusión, quisiera poner de relieve el valor socializador del aprendizaje cooperativo porque, a pesar de los pequeños roces que pueden surgir en determinados momentos y en determinados grupos, los alumnos, en general, han colaborado entre ellos, se han ayudado mutuamente y han presentado todos ellos un producto final que ha supuesto la culminación de todo el proceso.
Para finalizar, la valoración general de la experiencia ha sido positiva. Las dificultades se relacionan fundamentalmente con el trabajo en equipo ya que hay estudiantes que tienen dificultad para trabajar de manera colaborativa. Otra dificultad que nos hemos encontrado es el poco tiempo del que hemos dispuesto para sacar adelante todas las tareas, algo que han puesto de relieve muchos alumnos en la valoración final del proyecto. Y, por último, a todas estas dificultades inherentes casi a cualquier proyecto de estas características, hay que sumar la escasa e insuficiente dotación tecnológica de la que dispone nuestro instituto, lo que nos ha obligado, por ejemplo, a hacer las tarjetas ortográficas a mano. De hecho, los equipos de trabajo que optaron por presentarlas de manera digital, tuvieron que realizarlas fuera del horario escolar. En cualquier caso, creo que el alumnado ha sabido suplir la falta de tecnología con un torrente de imaginación que, en algunos casos, se ha materializado en productos finales muy vistosos y originales. He aquí algunas muestras de ello:
2 comentarios:
Felicidades por ese magnifico trabajo, me parece genial y muy util.
Gracias por compsrtir.
Felicidades por ese magnifico trabajo, me parece genial y muy util.
Gracias por compartir.
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